La desconflicción y coordinación del espacio aéreo es fundamental para las fuerzas terrestres. Algunos retos de integración aire-tierra pueden superarse instalando actualizaciones de software en las aeronaves existentes. El valor de la desconflicción y coordinación del espacio aéreo proviene de la integración de las comunicaciones digitales entre las diferentes plataformas.
La desconflicción y coordinación del espacio aéreo es fundamental para las fuerzas terrestres.
La desconflicción y coordinación del espacio aéreo es fundamental para las fuerzas terrestres. Las complejidades inherentes a la desconflicción y coordinación del espacio aéreo hacen que sea un problema complejo que requiere la atención urgente de los líderes a todos los niveles.
Algunos problemas de integración aire-tierra pueden superarse instalando actualizaciones de software en las aeronaves existentes.
Además de las mejoras de hardware descritas anteriormente, algunos retos de integración aire-tierra pueden superarse instalando actualizaciones de software en las aeronaves existentes. Por ejemplo, una actualización de software está diseñada para mejorar la comunicación entre las tropas de tierra y los medios aéreos. Esta actualización permitiría a los puestos de mando y a otras fuerzas en tierra ver una vista aérea de una zona que estuviera siendo vigilada por un vehículo aéreo no tripulado (UAV). Al proporcionar esta información, podría ayudar a reducir el fratricidio y mejorar la coordinación entre las tropas de tierra y los UAV cuando trabajen juntos. La actualización también podría ayudar a planificar las misiones proporcionando datos sobre las posiciones del enemigo o la ubicación de las fuerzas amigas.Otra actualización del software ayuda a garantizar que los UAV no entren en el espacio aéreo restringido sin autorización.
El valor de la desconflicción y la coordinación del espacio aéreo proviene de la integración de las comunicaciones digitales entre las diferentes plataformas.
- La desconflicción y coordinación del espacio aéreo es fundamental para las fuerzas terrestres.
- Algunos retos de integración aire-tierra pueden superarse instalando actualizaciones de software en las aeronaves existentes. Esto mejoraría la capacidad de comunicación entre diferentes plataformas, aumentando el conocimiento de la situación y reduciendo el fratricidio.
- El valor de la desconflicción y la coordinación del espacio aéreo proviene de la integración de las comunicaciones digitales entre las diferentes plataformas.
Una mejor desconflicción y coordinación del espacio aéreo mejora las capacidades de las fuerzas terrestres
La desconflicción y coordinación del espacio aéreo es fundamental para que las fuerzas terrestres puedan llevar a cabo sus operaciones. Permite a los comandantes optimizar el uso de todos los recursos disponibles asegurándose de que pueden obtener el apoyo y la asistencia adecuados en el momento y el lugar adecuados. Por ejemplo, la desconflicción del espacio aéreo permite a un comandante de tierra determinar si hay algún peligro potencial en las inmediaciones de sus fuerzas; también le ayuda a evitar que los aviones los sobrevuelen durante las misiones de combate. Además, la desconfiguración del espacio aéreo puede utilizarse como multiplicador de fuerzas al permitir que los sistemas aéreos no tripulados (UAS) tengan mayor libertad dentro de una zona de operaciones, ya que sus trayectorias de vuelo no entrarán en conflicto con las aeronaves tripuladas que operan en esa misma zona.
Conclusión
Las fuerzas terrestres deben ser capaces de comunicarse con las fuerzas aéreas para coordinar eficazmente las operaciones, pero ésta es una tarea difícil. La desconflicción y coordinación del espacio aéreo implica que tanto las fuerzas terrestres como las aéreas trabajen juntas para poder operar con seguridad en el espacio aéreo de la otra parte sin colisionar o quedar fuera del alcance de las comunicaciones. Las tropas terrestres tienen la capacidad de ver los movimientos del enemigo en tierra, mientras que los aviones proporcionan capacidades de vigilancia de largo alcance desde arriba. Estos dos activos son fundamentales en cualquier operación militar, pero requieren un alto nivel de confianza entre todas las partes implicadas.